Este trabajo ha sido realizado por FABRI S.A. en cuatro oportunidades, cada una de ellas representó un verdadero desafío para la Empresa desde el punto de vista organizativo dado el corto plazo disponible para la ejecución de las tareas. La obra en sí, consistió en la eliminación del horno antigüo y la construcción de un nuevo horno de fosa de cocción de ánodos formado por 18 cámaras con sus respectivas tapas, lo que representa la movilización de un número considerable de obreros, principalmente fumistas, para montar 5000 toneladas de ladrillos refractarios en cada horno y en el perentorio plazo de noventa días. Para ello se debió organizar un eficiente apoyo logístico que permitiera abastecer de materiales y herramientas a los operarios que trabajaban en turnos continuos en un área del orden de los 2000 metros cuadrados, ya que las dimensiones del foso en el cual se debían construir las 18 cámaras mencionadas es de 186 metros de largo por 12 metros de ancho y 12 metros de profundidad. La obra se ejecutó de acuerdo a especificaciones y bajo el control de calidad de Electro Carbonium de Italia y del comitente ALUAR Aluminio Argentino S.A.I.C.